Cuando se trata de criar hijos bilingües, abundan los buenos consejos y la desinformación. Desmintamos algunos de los mitos más comunes con datos basados en investigaciones y experiencias reales.
Mito n.° 1: Aprender dos idiomas confunde a los niños
Realidad: Los niños son increíblemente hábiles para distinguir entre idiomas, incluso desde la infancia. Una investigación de la Universidad de Columbia Británica y la Universidad Radboud descubrió que los bebés bilingües pueden diferenciar entre dos idiomas incluso antes de hablar. La alternancia de idiomas no es un signo de confusión, sino una parte normal y saludable del desarrollo bilingüe.
Mito n.° 2: Los niños bilingües tendrán retraso en el habla
Realidad: No hay evidencia de que el bilingüismo cause retraso en el lenguaje. De hecho, los niños bilingües alcanzan los hitos lingüísticos más importantes en un tiempo similar al de sus compañeros monolingües. La Asociación Americana del Habla, el Lenguaje y la Audición confirma que el bilingüismo no causa trastornos del habla ni del lenguaje.
Mito n.° 3: Un padre, un idioma es la única opción
Realidad: Si bien el enfoque "Un padre, un idioma" funciona para algunas familias, no es el único método. Muchas familias crían con éxito a sus hijos bilingües mediante entornos con idiomas mixtos, apoyo comunitario o inmersión en la lengua materna en el hogar. La flexibilidad es clave.
Mito n.° 4: Es necesario hablar un segundo idioma con fluidez para enseñarle a un hijo
Realidad: ¡Falso! Lo que más importa es la exposición constante, no la perfección. Incluso los padres que no dominan el idioma pueden usar libros, música, cuentos y herramientas como Phoenyx para introducir y reforzar un segundo idioma de forma divertida y natural.
Mito n.° 5: Los niños eventualmente abandonarán un idioma
Realidad: El mantenimiento de un idioma depende de la exposición y la motivación constantes. Los niños no olvidan un idioma de forma natural; dejan de usarlo cuando ya no lo necesitan o no lo escuchan. Por eso es crucial que el segundo idioma sea significativo y relevante (por ejemplo, para conectar con la familia o viajar).
La verdad triunfa . No dejes que los mitos te detengan. Criar hijos bilingües puede requerir intención y paciencia, pero es totalmente factible y muy gratificante. Mantente al tanto, ya que seguiremos explorando más maneras de apoyarte a ti y a tu pequeño que aprende idiomas.