¿Cuál es el mejor momento para introducir un segundo idioma?


El tiempo lo es todo, especialmente cuando se trata del aprendizaje de idiomas. Una de las preguntas más frecuentes de los padres es: ¿cuándo debería empezar a introducir un segundo idioma a mi hijo? La respuesta, respaldada por décadas de investigación sobre el desarrollo, es simple: cuanto antes, mejor.

La ventana de la ciencia del lenguaje

Según la Hipótesis del Período Crítico (Lenneberg, 1967), el cerebro humano está biológicamente preparado para absorber el lenguaje durante los primeros años de vida. Durante esta "ventana lingüística", generalmente desde el nacimiento hasta los 7 años aproximadamente, el cerebro es especialmente receptivo a sonidos, estructuras y vocabulario. De hecho, los niños expuestos a una segunda lengua a temprana edad suelen desarrollar una pronunciación y una gramática similares a las de un nativo.

Un estudio masivo de 2018 del MIT (Hartshorne, Tenenbaum y Pinker) en el que participaron más de 600.000 personas confirmó que, si bien la capacidad de aprendizaje de idiomas se mantiene fuerte hasta aproximadamente los 17 años, la curva más pronunciada para una fácil adquisición es antes de los 10 años. La exposición temprana maximiza el potencial de fluidez.

Los bebés son lingüistas naturales

Incluso antes de poder hablar, los bebés absorben el ritmo y los tonos del lenguaje. Una investigación de Patricia Kuhl, de la Universidad de Washington, demuestra que bebés de tan solo 6 meses pueden distinguir los sonidos de varios idiomas. Esta capacidad empieza a disminuir si solo escuchan un idioma de forma constante.

¿Qué pasa si empiezas más tarde?

Nunca es tarde para empezar, pero podría requerir más esfuerzo. Niños mayores e incluso adultos pueden adquirir fluidez en un segundo idioma con exposición y práctica constantes. La clave está en que el aprendizaje sea inmersivo y divertido.

Estrategias cotidianas para aprovechar al máximo la ventana

  • Háblale a tu bebé en tu idioma nativo, incluso si tu pareja habla otro.

  • Utilice música y cuentos en ambos idiomas.

  • Considere herramientas como Phoenyx que están diseñadas para una interacción bilingüe lúdica desde el principio.

  • No tengas miedo de mezclar idiomas: cambiar de código es una parte normal del desarrollo bilingüe.

El resultado final

Empieza ahora. Ya sea que tu hijo tenga 6 meses o 6 años, introducir un segundo idioma le brindará ventajas cognitivas, culturales y emocionales que durarán toda la vida. Tus esfuerzos de hoy pueden abrir un mundo de oportunidades mañana.